viernes, 3 de febrero de 2012

Samskara II o El mejor amigo.

No sé qué pasa contigo, no sé qué pasa conmigo, no sé qué pasa. Dónde estás, en qué lugar se cubre la tierra de miedo ante tu mente arrasadora.
Cierro los ojos y percibo tus palabras afiladas en mi cuello... nunca podría haber sido de otra forma, ¿verdad?
Tuve que arrasar con la poca inocencia que me quedaba, te arrebaté la ropa mil veces mientras hacías todo menos quitarte siquiera los zapatos:  Y ahora alucino por no haberte violado cuando tuve la ocasión de hacerlo, me llené de hijos de señoras de trabajos importantes y otros menos importantes pero trabajos al fin y al cabo porque es así la cosa no vaya a ser que después digan que soy un tuerto entre ciegos y que reprimo improperios en mi boca contra tu solícita capacidad de espetarlos cuando se te da la gana.
Diría que todavía huelo tu pubis imposible -ese de 17 años bajo la falda del colegio-, que las papilas gustativas se enervan apenas un poco, como cuando pensamos en duraznos, o en la insoportable cavidad que jamás se tuvo.

jueves, 2 de febrero de 2012

Rabia, rabia, rabiaaaaaaaaaaaa.





"Será que a la más profunda alegría
me habrá seguido la rabia ese día,
la rabia simple del hombre silvestre,
la rabia bomba, la rabia de muerte,
la rabia imperio asesino de niños,
la rabia se me ha podrido el cariño,
la rabia madre, por Dios, tengo frío,
la rabia es mío, eso es mío, sólo mío,
la rabia bebo pero no me mojo,
la rabia miedo a perder el manojo,
la rabia hijo zapato de tierra,
la rabia dame o te hago la guerra,
la rabia todo tiene su momento,
la rabia el grito se lo lleva el viento,
la rabia el oro sobre la conciencia,
la rabia —coño— paciencia, paciencia.

La rabia es mi vocación."ó



(Ya saben quién)