miércoles, 28 de diciembre de 2011

Apúrate!

Hace un rato un amigo me decía "descreída" y yo me moría de la risa. Si en cuanto a valores y urgencias religiosas se trata, tendría que aceptarlo; pero creo en la mordida del pubis, en la osadía de mi letra caliente.
Qué...si todo al final es una calentura, una fiebre, si no lo vivo así, entonces no.
No creo en mí misma, pero sí creo en lo que soy en una dimensión más cercana. Beso el papel, besos unos dedos; mis ojitos no le creen al primero que pasa, pero mis ojitos le creen todo al Posiblexactolvidadizo Uno que se guarda de mí en algún sitio de esta cajita que llaman Santiago de Chile.

Apúrate, hermano-hermana, que estoy a un paso de dejar de creer en ti.

viernes, 23 de diciembre de 2011

Say the truth SUCKS!

Decir la verdad es un completo chiquero...todavía me pregunto quién fue el que propugnó tamaña estupidez al viento y todos le creyeron...y, sinceramente, no quiero herir susceptibilidades religiosas, por eso hablo en genérico, y que todos los malditos mesías de la historia sientan la oreja bien caliente y roja: Sí, estoy hablando mal de un gran número de personas y uds. vienen en el paquete.
El problema viene aquí, que después se hace costumbre y más allá de las ultra repetidas coartadas que se han generado con los años, la verdad sale por la boca por artes de nigromante.



Esta vida ya no me gustó, quiero probar con la siguiente, por favor!

jueves, 8 de diciembre de 2011

El pasajero oscuro.

Cuán difícil es luchar contra sí mismo, contra los viejos hábitos. No ya como viviente sino como observante, me conduelo de las pobrezas de un hombre en particular desde anoche.

La peor bestia que te puede perseguir es la vergüenza.
El peor enemigo es uno mismo.
¿Qué se puede hacer cuando el pasajero oscuro con sombrero de ala ancha te come las entrañas?

No tengo respuestas, lo único que puedo decir es Pobre de ti, querido, pobre de ti.